Tsuyoshi es lamido por una extraña mujer de camino a la casa de su prometida Miku. El perrito de Miku lame a Tsuyoshi en los mismos lugares que lo había hecho la extraña mujer y acaba muerto hechando espuma por la boca y a Tsuyoshi le salen sarpullidos en los lugares de su piel que fueron lamidos. Tsuyishi fallecería en el hospital y la policía encontraría rastros de veneno de origen animal en su sangre.

La extraña mujer aterroriza al barrio cobrándose más víctimas y se forma un grupo de vigilancia vecinal en el que participa Miku con tal de atrapar a esa mujer. Miku logra atraparla y pudo comtemplar que su lengua tenía un tamaño enorme y un aspecto monstruoso. La mujer es internada en un hospital psiquiátrico y no se encuentran en ella y su lengua rastros de veneno, siendo liberada cuando se consideró que sus tratamientos en el hospital fueron efectivos, aunque Miku teme que vuelva a las andadas, así que se prepara para matarla si lo hace.