En la ciudad empezó una cadena de suicidios. Un hombre encontró a su mujer Erika en medio de un intento de suicidio, pero, al llegar a tiempo, Erika pudo sobrevivir. En su nota de suicidio solo ponía que en la ciudad iban a suceder sucesos insólidos, siendo esta nota parecida a la de las demás víctimas de suicidio.

Erika desaparece junto a 200 jóvenes de la ciudad de forma misteriosa y la encuentran solo a ella al día siguiente colgada de una rama en una colina, sin que haya rastro del resto de personas desaparecidas. Erika sigue durmiendo desde que fue encontrada durante días, despertando súbitamente para anunciar la caída de una de las personas desaparecidas desde el cielo, cuyo cadáver tiene marcado en el rostro una expresión de absoluto terror.