El autor de cómic Jaime Martín nos ofrece el relato de lo que vivieron en la guerra civil y en la posguerra su abuela Isabel y su abuelo Jaime. Isabel vivía en Melilla y trabajaba como modista para un general de la república justo antes del golpe de estado. Como rondaba con miembros de la CNT, sindicato histórico anarquista, los fascistas la tenían en sus listas de gente a las que asesinar. Isabel tuvo que huir en mitad de la noche cuando un grupo de fascistas vino a su casa a fusilarla para poder salvar la vida.

Isabel viaja a Barcelona para vivir en casa de su tía. Allí conocería a Jaime, quien sería su esposo, al cuidar de su madre en su lecho de muerte, que vivía en la casa de al lado. Jaime luchó en la guerra civil en el bando republicano. Al terminar la guerra casi lo fusilan y solo se libra porque uno de los fascistas lo reconoce como el campeón de boxeo del barrio.

Ahora Isabel y Jaime tienen que buscar un modo de sobrevivir en las posguerra. Al final consiguen montar un negocio de recogida y reciclaje de envases de vidrio, lo que les permite tener una buena situación económica, pero siempre viviendo con el miedo de lo que les podría hacer el régimen fascista.