Enrique Montero es un maestro represaliado por haber combatido en el bando republicano durante la guerra civil, por lo que, durante la posguerra, al no tener permitido ejercer la docencia, intenta ganarse la vida primero como humorista gráfico y después como dibujante de una historieta de aventuras del estilo de Roberto Alcazar protagonizada por un aventurero español de nombre Pedro Guzman. Mientras Enrique solo busca poder vivir tranquilamente junto a su mujer en la España de la posguerra recibe la visita de un miembro del partido comunista enviado por un amigo en común.
Este amigo quiere que Enrique encuentre a Bozal, miembro del partido que confía en Enrique que libra la guerra por su cuenta y se queda con el dinero de los golpes, por lo que el partido lo quiere ejecutar. Mientras tanto, la policía intenta también hallar a Bozal utilizando a un chivato infiltrado en el partido.
Durante el transcurso de la historia principal se nos cuenta en paralelo una de las aventuras de Pedro Guzman. En ésta, tiene que buscar a Belial, que está usando una máquina, el artefacto perverso, para borrar la memoria del alcalde, el comisario y unos cuantos jueces para hacerse con el control de la ciudad.
Este cómic está guionizado por Felipe Hernández Cava y dibujado por Federico del Barrio, quien logra otorgar a ciertos personajes de rasgos faciales de algunos animales.